Apenas habíamos salido cuando me he dado cuenta de lo desierto que estaba el pueblo, claro 17 de agosto. Lo he visto venir, la mitad de las zapaterias del pueblo cerradas y en la otra mitad seguro que no tenían ya número de zapatos de verano. Por fin hemos llegado a una bastante grande que tiene un poco de todo y he visto muy rebajadas bambas de colores y alpargatas de esas con suela de goma que parecen de vestir. no he encontrado número en ninguno de los colores que me gustaban para ninguno de los dos niños. Al final he cogido dos bambas rosas para Inés y dos alpargatas para Mateo, los únicos que he encontrado.
Así que he vuelto a casa con la sensación de haber cumplido la misión a medias y entonces los he visto, escondidos entre los zapatos de Nacho (el mayor) en el zapatero.
De cuerdo que vistos así no tienen mucho glamour, pero a mi de pequeña me encantaban y me parecían comodísimas. Ha sido imposible que Nacho se los pusiera porque no le han cuadrado de estación, pero me han parecido perfectos para ella. Blancos además, lo que estaba buscando. Pero cuando los ha visto casi me los tira a la cara. Que eran feos, que no le gustaban, que quedaban feos, y un pelín grandes, la verdad. En ese momento he pensado en este DIY tan sencillisimo.
MATERIALES
Tijeras
Zapatillas de tela
Lazo o cordón, como 1metro
Pistola de silicona (opcional)
Hacemos unos agujeros en la zapatilla para ir pasando el lazo con efecto cosido y en el lateral externo de la zapatilla dejamos los dos extremos para hacer el detalle del lazo así
Por último después de hacer el lazo colocamos un punto de silicona en la zona del elástico para que quede más bonito. La foto es horrible pero no me ha dejado hacerle más y ya no se las quería quitar.
El resultado ha sido este
Ha posado y todo, estaba feliz. He aprovechado para hacérselas a juego con un vestido que cosimos a partir de una falda mía. Ya os lo enseñaré.
Luego he pensado que también podíamos darle un aire más chulo a las bambas con un cordón que tenía por ahí abandonado. Sólo lo he desecho un poco y han quedado bastante monas, aunque creo que con cordón de algodón quedarán mejor, el de seda se deshace demasiado.
Pues a customizar se ha dicho. Espero que os sea útil la idea.
Es una idea estupenda: da un toque de color a las zapatillas y las hace un poco más especiales. Antes de saber que era un apaño de Noe, Inés me las enseñó y me dijo: "mira, las ha hecho mi madre". Por un momento, pensé que las habrían comprado..., pero los niños nunca mienten.
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