martes, 27 de agosto de 2013

MANUALIDAD/JUEGO CON NIÑOS: PIEDRAS MARCIANOS



Hace mucho tiempo vi en la página de Facebook de pelusas factory estos simpáticos marcianos (recomiendo mucho esta página por la cantidad de ideas y diy que tiene) . No se quien los inventó pero me parecieron majísimos y pensé que sería muy divertido hacerlos.
Hace un mes más o menos fui con los niños a dar un paseo por la luna. El patio era un sitio perfecto, la mesa fue nuestro cohete y aterrizamos en el césped con nuestros trajes espaciales. Caminamos influidos por la falta de gravedad entre risas. Nacho e Inés no querían marcharse sin un recuerdo y empezaron a coger piedras bonitas. Entonces se iluminó una luz en mi cabeza y me acordé  de los marcianitos simpáticos. 
A la mañana siguiente nos pusimos manos a la obra para hacer nuestra familia de extraterrestres con las piedras lunares que habían atesorado la mañana anterior.

MATERIALES

Piedras
Sprays o pintura acrílica ( son más rápidos y más baratos los sprays)
Rotuladores permanentes: negro y blanco
Ojos de varios tamaños
Pistola de silicona o loctite



Lo primero es pintar las piedras de colores. Yo puse un poco de papel albal y las pinté la noche anterior para que se secaran bien y tenerlas listas por la mañana. Por la edad de mis niños preferí hacer este paso sin ellos, pero es que tienen 4 y 3 años. 
Al día siguiente ellos eligieron los ojos que quería  para cada piedra (observese que hay ojos chica y chico ya os imagináis quien escogió qué) y yo los fui pegando donde me decían con la pistola de silicona. Después, con mucho cuidado, fueron pintando las bocas para que yo rellenara. Si Inés quería formas de corazón me las pedía a mi, por lo demás, ella se apañaba bastante bien.



Cuando ya teníamos casi todos hechos los dos dijeron que se iban a poner muy tristes los marcianitos si no les tenían un papá y una mamá. El papá fue la piedrota enorme que se había traído Nacho el fin de semana anterior de Segovia, y la mamá, la piedra más grande que encontraron en el patio. Ahí no terminó la cosa porque, como es lógico, una familia tan grande necesitaba una casa. Después de dar un par de vueltas a la casa sin encontrar nada que me convenciera, me acordé de esa botella de legía que tenía guardada para otra cosa pero que nos valía perfectamente como casa para nuestros nuevos amigos. La pintaron, le pusieron un tubo que se había encontrado en el parque, me dijeron donde querían las ventanas y los ojitos y nos quedó así.



La verdad es que pasamos tres mañanas la mar de entretenidos entre unas cosas y otras. Los marcianos han dado muchísimo de sí, juegan a esconderlos y encontrarlos por turnos. Se los han presentado a todos los que han pasado por casa. Juegan a papas y mamas, se han subido la casa al lado de su cama varios días para que les hicieran compañía y les tienen un cariño tremendo.
Yo os recomiendo que los hagáis, son fáciles, baratos y muy versátiles. Hasta podéis regalárselos a algún pequeñajo al que le gusten los astronautas.
Espero que los hagáis y lo paséis tan bien como nosotros.






NOTA: en pequeocio he encontrado otras maneras de pintar piedras, seguro que me ánimo ha hacer otros juegos como los que ellos proponen, abecedarios, coches, muñecos. Podéis echarles un vistazo en el siguiente link http://pequeocio.com/pintar-piedras/

1 comentario:

  1. Enhorabuena por tu iniciativa!!! Seguro que va a ser un gran punto de encuentro. Mucha suerte!!!! Besos

    ResponderEliminar